Last Planner System (LPS)
El ‘Last Planner System’ o ‘Sistema de último planificador’ es un método de control de producción del Lean Construction, diseñado para entregar un flujo de trabajo fiable y un aprendizaje rápido.
Para ello, se integra en el planning, la consideración sobre las prácticas ideales, las prácticas factibles, las prácticas que se llevarán a cabo, y las prácticas que ya se han llevado a cabo.
Estas consideraciones se tendrán en cuenta a la hora de preparar la planificación de obra y la asignación de responsabilidades.
El Last Planner se define como la última persona capaz de asegurar un flujo de trabajo predecible aguas abajo. LPS faculta al último planificador para conseguir compromisos de entrega en base a la situación real de un puesto de trabajo, en lugar de hacerlo en base a los planes teóricos.
El LPS se basa en una gestión eficaz de control de costes, cumplimiento de plazos, aumento de calidad y minimización de riesgos en un Sistema Pull*, en el que el objetivo marca el ritmo de las tareas, en vez de ser las tareas las que condicionan el objetivo.
Se trata de un sistema de gestión visual y física que se desarrolla en la Big Room a pie de obra, fábrica u oficina, a través de paneles, tarjetas y elementos físicos, que pueden tener un respaldo digital.
Este sistema asegura control de la producción, planificación y asignación de tareas en un flujo de trabajo.
Tiene un desarrollo secuencial, desde lo macro a lo micro, mediante un Plan maestro, una planificación intermedia y otra semanal o diaria, según las características del proyecto.
Consiste en una monitorización de tareas con herramientas de control como KPIs**, PPC 80%***, pdca****, etc.
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